¿PAKALES DE PLÁSTICO, ES EN SERIO? EL DÍA DEL NIÑO CONVERTIDO EN DESFILE DE PROPAGANDA

Chiapasenlamira.com Tapachula, Chiapas | 2 de mayo de 2025Desde que el expresidente López Obrador lanzó su propio muñeco —una versión tropical del Dr. Simi con guayabera y mensaje político incluido—, parece haberse desatado una «moda» entre funcionarios y dependencias por replicarse en formato plástico.Pero una cosa es el merchandising caricaturesco, y otra, muy distinta y grave, es cuando esa lógica se traslada a las infancias, con implicaciones simbólicas aún más preocupantes como la de militarización.Ayer, mientras millones de niñas y niños celebraban su día con juegos, actividades escolares y la magia de la infancia, la Secretaría de Seguridad del Pueblo decidió gastar recursos públicos y «festejar» con figuras de acción tipo Max Steel, pero con el rostro de Pakales, su ya gastado avatar institucional.En Tapachula, fue el propio alcalde Yamil Melgar Bravo quien encabezó la entrega de estos muñecos, validando con su presencia y discurso una estrategia que, lejos de promover valores lúdicos o educativos, refuerza una visión institucionalizada del poder armado como modelo a seguir.Este acto no es inocente. Lo que está en juego es la visión que estamos construyendo para las próximas generaciones. Mientras el país enfrenta profundas carencias en educación, salud y seguridad, se gastan recursos públicos en una estrategia vacía, que no aborda los problemas reales. Se está normalizando que una figura arm@da y uniformada sea vista como modelo de admiración infantil. Y eso, en un contexto donde la viol3ncia es cotidiana, no es solo inoportuno, es irresponsable.No se trató de regalar pelotas, cuentos, colores o juguetes que promuevan la imaginación, la cooperación o la creatividad. Se trató de imponer una narrativa: que la autoridad arm@da es admirable, que el uniforme es aspiracional, que el poder se venera. Es, de facto, una operación simbólica de propaganda. Y lo más absurdo es que contradice las propias campañas del Ejército Mexicano, que en años recientes promovió el intercambio de juguetes bélic0s por juguetes lúdicos y pacíficos. ¿En qué momento pasamos del juego a la glorificación del militarismo institucionalizado?Pakales no es solo un muñeco. Es una síntesis de cómo se intenta lavar la imagen de instituciones que han fallado en lo esencial: brindar seguridad, construir confianza y respetar derechos. Y ahora, además, buscan reconocimiento a través de la mirada ingenua de los niños y niñas. ¿De verdad creen que un muñeco puede revertir el desgaste institucional, de arbitrariedades, de falta de profesionalismo? ¿De verdad eso quieren enseñarles a las futuras generaciones?Porque lo simbólico también educa, también forma. Regalar un cuento o una pelota abre posibilidades; regalar un muñeco armado es sembrar una visión estrecha y peligr0sa del mundo. ¿Y qué dice eso del rumbo de las políticas públicas? Que quienes deben protegernos están jugando con las infancias como si fueran botín simbólico.Las niñas y los niños no necesitan propaganda. Necesitan respeto, escucha, libertad y espacios seguros. Todo lo demás es simulación… en forma de plástico.#Opinión #ChiapasEnLaMira #Pakales #DíaDelNiño #NoEsJuego #SeguridadConJuguetes #InfanciasNoBotín#ChiapasEnLaMiraNoticias #ChiapasEnLaMiraInforma