Crisis y Nepotismo en la Agencia Digital Tecnológica de Chiapas

La Agencia Digital Tecnológica: El sinsentido de la difusión y divulgación de la ciencia en ChiapasChiapasenlamira.comLa comunidad académica chiapaneca fue tomada por sorpresa cuando se anunció que el otrora Consejo Estatal de Ciencia, Tecnología e Innovación del Estado de Chiapas cambiaría su nombre por el de Agencia Digital Tecnológica del Estado. La sorpresa fue aún mayor al confirmarse que su titular sería Jovani Salazar Ruiz, un personaje sin trayectoria ni experiencia comprobable en los ámbitos académicos, científicos o de divulgación.A cien días del nuevo gobierno, la percepción que prevalece sobre esta dependencia es de parálisis. La única señal de actividad es su sitio web, donde se siguen compartiendo las mismas convocatorias de siempre: estancias científicas y tecnológicas, reconocimiento al mérito estatal de investigación, apoyos al Sistema Estatal de Investigadores… todo sin el menor asomo de innovación, cambio o dirección estratégica.El nombramiento de Jovani Salazar parece obedecer más a un pago de favores o a un consuelo tras una fallida carrera política —al no lograr posiciones como la alcaldía de Tuxtla— que a un verdadero compromiso con la ciencia en Chiapas. Esta agencia, en lugar de estar al servicio de la transformación digital y del impulso a la ciencia, parece haberle sido entregada como premio de consolación. Pero, lejos de demostrar capacidad o voluntad de cambio, Salazar se limita a reproducir un lenguaje meritocrático, optimista, “juvenil” y vacío, completamente desconectado de las necesidades reales de la comunidad científica.Su llegada ha opacado las aspiraciones legítimas de muchos profesionales de la divulgación científica con formación, trayectoria y compromiso. Al igual que otros miembros del actual gabinete estatal, Salazar ha demostrado una preocupante falta de visión, incompetencia, deshumanización, nepotismo, acoso laboral y despidos injustificados. Más grave aún: mantiene en su equipo a funcionarios señalados por acoso sexual a jóvenes trabajadoras, acusaciones que fueron ampliamente difundidas en redes sociales. ¿Y entonces… qué sucede con el discurso del Ejecutivo sobre la agenda de género? ¿Dónde está la Secretaría de Igualdad de Género ante estos hechos?La Agencia Digital Tecnológica del Estado va a la deriva. Ha roto vínculos con universidades y centros de investigación, y ha dejado de ser un referente para la comunidad científica. Su credibilidad institucional se ha erosionado, no solo entre investigadores, sino también ante la ciudadanía. Resulta alarmante que quien la dirige no cuente con producción científica alguna: ni libros individuales, ni coordinación de obras colectivas, ni participación en revistas arbitradas de prestigio. Su perfil está vacío.Eduardo Ramírez debe voltear a ver lo que ocurre con esta dependencia. No bastan las fotos sonrientes en redes sociales, los abrazos al gobernador o los discursos motivacionales. No pueden permitir que esta instancia se convierta en el hazmerreír del sector científico. La presencia y liderazgo del sector académico es urgente para corregir el rumbo.Como si fuera poco, la reciente llegada de Leonardo Cuesta Ramos, exalcalde de Chiapa de Corzo, confirma la continuidad de los compadrazgos, el nepotismo y los conflictos de interés. Su historial no es precisamente motivo de orgullo. Basta preguntar a los chiapacorceños, quienes no veían la hora de que concluyera su administración. ¿Qué sabe él de ciencia, de tecnología, de innovación? ¿Ya no había otro lugar para colocarlo y decidieron enviarlo a una institución que exige precisamente lo que no tiene?La más perjudicada de esta situación es la ciencia chiapaneca. La revista La Ciencia Aplicada en Chiapas perdió su clave ISBN y necesita con urgencia una reestructuración para recuperar su relevancia. La comunidad científica se ha alejado de esta publicación, que además no está indexada en SCOPUS, la base de datos científica internacional más reconocida. Y es evidente que Jovani Salazar ni siquiera comprende la utilidad de esta herramienta fundamental para investigadores, educadores y estudiantes. ¿Cómo podría hacerlo, si ni siquiera tiene claro de qué va la institución que encabeza?Lo más grave es que las acusaciones por acoso sexual contra sus allegados siguen impunes, y los despidos injustificados —comenzados desde enero— continúan sin explicación.La comunidad académica del estado merece respeto. Y, por supuesto, merece estar encabezada por una persona —hombre o mujer— con visión, experiencia y ética. No por un improvisado recompensado con una institución que ni entiende ni valora.La ciencia chiapaneca no puede ser el botín de cuotas políticas, ni el consuelo de quienes fracasaron en otras contiendas. La ciencia no es adorno, ni espectáculo, ni propaganda. Es una herramienta de transformación profunda, de pensamiento crítico y de construcción de futuro.Tratarla con frivolidad y desdén es condenar al estado al rezago. Y lo que Chiapas necesita hoy, más que nunca, es inteligencia, compromiso, honestidad y rigor.#ChiapasEnLaMira #AgenciaDigitalChiapas #JovaniSalazar #Nepotismo #CienciaConCompromiso #DivulgaciónCientífica #EduardoRamírez #AgendaDeGénero #ChiapasPorLaCiencia #JusticiaLaboral #SCOPUS #CorrupciónEnChiapas #NiUnaMenos #CrisisInstitucional redacta un titulo corto